Después de la obra
Qué la última representación de tu primera obra de teatro coincida con el día de tu santo, da lugar a consecuencias particulares. Un teléfono muy atareado, y algo encasquillado; gente que te felicita y no sabe que representas; personas que saben que representas pero no te felicitan...
Se me había olvidado que no existen listas negras... jeje.
La tensión por la obra se ha trasladado: prácticas, trabajos, amig@s que tengo algo abandonados, mi deber para con el blog y las estrellas de tinta. El final de un cuatrimestre muy intenso se acerca, se precipita podríamos decir. Y falta tiempo. ¡Tiempo!
A veces se me olvida disfrutar. Es odioso, lo repudio.
Quiero que llueva a menudo. Y así, cuando llegue una mañana despejada, pueda abrir mis brazos y sonreir a un cielo azul intenso de primavera. Creerme que todo esto que me pasa es genial. ¡Qué eres genial!
2 comentarios
uno -
La_U -
Un post un poco lioso.